En el intercambio pastoral de la última Asamblea Plenaria del Episcopado, los obispos vieron la conveniencia de que la Comisión Nacional de Justicia y Paz pudiera ofrecer un documento a la dirigencia del país. La Comisión recibió este encargo y confeccionó este documento que se presenta en el inicio de la Semana de Mayo. Este texto, además, sirve para que los equipos de Pastoral Social en cada diócesis puedan trabajarlo con los candidatos locales, y fomente el diálogo en todas las instancias de modo de llegar a consensos y coincidencias para el bien de nuestra Patria.
Teniendo a Dios como fuente de toda razón y justicia, en palabras de nuestra Constitución Nacional, proponemos las siguientes pautas básicas de coincidencia:
- Trabajar por la dignidad de todas las personas que habitan la Patria, en particular los más pobres y débiles, cuidando la vida desde su inicio hasta su fin natural.
- Reconstruir la confianza en nuestro país y con ella, el sentido de pertenencia; generando un acuerdo político y social, con primacía del bien común por sobre los intereses sectoriales.
- Fortalecer la democracia, asegurando la transparencia e independencia del poder judicial respecto del poder político.
- Fortalecer y extender la educación para todos los habitantes, a todos los niveles, respetando la pluralidad y los valores humanistas de nuestra cultura, libres de toda ideología reductiva y propiciando el desarrollo de la formación en oficios.
- Implementar políticas de desarrollo sustentable y estabilidad económica, estimulando la generación de trabajo digno e incrementando la participación del salario en la economía, facilitando las inversiones necesarias para la generación de puestos de trabajo genuino y garantizando el acceso al sistema de seguridad social a todas las personas que trabajan, cualquiera sea la condición en que lo hagan.
- Contribuir y estimular el desarrollo científico y tecnológico al servicio de la persona humana.
- Atender a los derechos de los pueblos originarios y cuidar los bienes naturales de la Casa Común, impulsando su aprovechamiento mediante tecnologías respetuosas de la naturaleza y de las personas, estableciendo mecanismos efectivos de control social.
- Incrementar el cuidado y acompañamiento de las personas que sufren problemas de adicción, en particular niños y adolescentes.
- Combatir la corrupción en todos los niveles.
- Intensificar la lucha contra el narcotráfico y la trata de personas, ampliando la protección a las mujeres y demás personas vulnerables.